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VAMOS [ 29 ] EDUCACIÓN INFANTIL tación de ferrocarril de Santiago. Los niños fueron recibidos por personal de Adif y conocieron su funcionamiento. Incluso aprendieron a comprar los bi- lletes de tren en las taquillas. Los niños de 4 años iniciaron el pro- yecto recibiendo una carta del alcalde en la que les pide ayuda para resolver una adivinanza a través de una foto de “Las Dos Marías”. Una vez resuelto ese acertijo descubren la temática del pro- yecto y celebran una asamblea donde comparten qué saben y qué quieren saber, y de aquí surgirán las actividades y salidas que darán forma al proyecto. Algunas de ellas son la creación de un puzle y collage de las Marías, un mu- ral de la alameda y la Catedral, trabajos plásticos sobre zonas representativas de la ciudad y su ubicación geográfica en España, etc. Todas las propuestas se van llevando a cabo a medida que los niños y las fa- milias nos envían aportaciones al aula, modelando lo que será el producto fi- nal del proyecto. Por último, los mayores del cole (5 años) están creando poco a poco su pasaporte peregrino. Para comenzar, cada niño se llevó a casa una hoja en la que completaron: dónde viven, qué conocen de Santiago de Compostela y qué les gustaría aprender sobre su ciu- dad. En una asamblea pusimos en co- mún esta información para iniciar así nuestra aventura. Algunos de los aspectos que trabaja- mos son las estatuas, parques, plazas y edificios de Santiago; la gastronomía, música tradicional y la cerámica de Sar- gadelos. Para integrar todo lo que hemos aprendido visitamos el Ayuntamiento, hicimos una gincana en la Alameda, probamos dulces típicos y elaboramos diferentes actividades plásticas. La importancia de la etapa de 0 a 6 La etapa de 0 a 6 años es las más cru- cial en el desarrollo evolutivo, ya que es en este momento donde se asientan todas las bases del que será el futuro adulto. Durante los primeros años de vida, el niño absorbe todo aquello que le rodea y es aquí donde cimentará su desarrollo lingüístico, cognitivo, emo- cional, social y psicomotor. Teniendo en cuenta que en estas edades la plas- ticidad de su cerebro está en su pleni- tud, es nuestra labor como educadores aprovechar y planificar su entorno ofre- ciéndoles los estímulos necesarios para que el niño alcance su máximo poten- cial. Los niños exploran su entorno y su propio cuerpo mediante el movimiento y el juego por lo que proporcionar un espacio adecuado y seguro les ayudará a desarrollarse de manera holística.